El enfrentamiento de Kamala Harris y Donald Trump: Revive la transmisión de Mega del debate presidencial de EEUU
- Por Ariel Araya | AFP
¿Qué pasó?
La noche de este martes se llevó a cabo el esperado primer debate entre los dos máximos aspirantes a ocupar el sillón presidencial de la Casa Blanca: Kamala Harris y Donald Trump. En la instancia, ambos intentaron convencer a los estadounidenses indecisos en una elección que no ha estado ajena de polémica, sobre todo tras la renuncia de Joe Biden a ser nuevamente candidato.
Estos comicios podrían significar la asunción de la primera mujer presidenta en la historia de Estados Unidos o el regreso del controversial magnate, alternativas que no dejan a nadie indiferente.
El debate comenzó a las 22:00 horas de Chile y fue transmitido por las pantallas de Meganoticias Ahora, en Mega Go y YouTube.
¿Qué temas se abordaron en el debate?
Según las encuestas, la economía es la principal preocupación de los ciudadanos estadounidenses, así que parte del debate giró en torno a cómo piensa cada uno en abaratar el costo de la vida.
LO ÚLTIMOSe discutió asimismo de migración ilegal en la frontera con México, uno de los temas favoritos del republicano de 78 años, quien amenaza con llevar a cabo una deportación masiva si vuelve a ser presidente.
El derecho al aborto también fue un tema. Harris, de 59 años, lo defiende a capa y espada, mientas que Trump prefiere no explayarse para evitar ahuyentar votos.
Así fueron las condiciones del debate
Ambos dispusieron de 90 minutos para convencer a los millones de espectadores que seguirán el duelo televisivo organizado por la cadena ABC, y que tendrá lugar en Filadelfia.
Harris y Trump estuvieron de pie, detrás de un atril, y sus únicas armas fueron un bloc de notas, un bolígrafo y un vaso de agua. No hubo público. Los micrófonos solo estuvieron encendidos cuando les tocó hablar.
Durante décadas estos debates permitían a un candidato distinguirse de su rival, pero no hacían mella en la campaña. Ahora, en cambio, el pésimo desempeño de Joe Biden precipitó su caída hasta que el 21 de julio pasó el testigo a su vicepresidenta.
Desde entonces, Harris se ha convertido en un fenómeno político. Recabó un apoyo masivo en cuestión de horas, rompió récords en recaudación de fondos, saboreó una nominación triunfal en la convención demócrata de Chicago y consiguió igualar mucho las encuestas sobre la intención de voto.
Pero muchos estadounidenses (el 28% según un sondeo New York Times/Siena College) no se hacen una idea de cómo es y qué propone. Así que tendrá que convencerlos.
Su rival, por otro lado, quien fue blanco de un intento de asesinato en julio, es archiconocido y suscita pasión y odio a partes iguales. Sus simpatizantes le han sido fieles a pesar de sus procesos judiciales, que Harris, una exfiscal, podría recordarle.
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