Es uno de los hombres más ricos de Suiza y quiere adoptar a su jardinero de 51 años para heredarle su fortuna

Imagina que eres trabajador de un multimillonario que desea adoptarte para que heredes toda su fortuna una vez que fallezca. Increíble, ¿no?

Ese es el sueño que está viviendo un hombre que se desempeñó como jardinero de Nicolas Puech, accionista y nieto del fundador de Hermès, la lujosa marca francesa que comercializa artículos de piel y que está presente en Chile, ubicada en la comuna de Vitacura.

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Con un patrimonio cercano a los 10.000 millones de euros (en pesos chilenos, la cifra se traduce a $9.519.368.265.000), el suizo de 80 años no tiene hijos y está soltero, por lo que no posee familiares directos a quien dejarle su fortuna.

Sin embargo, Puech primero tiene que solucionar distintos acuerdos para adoptar al trabajador de 51 años.

 

Nicolas Puech es el nieto del fundador de la marca Hermès, Thierry Hermès (EuroNews)

 

Los esfuerzos del multimillonario por adoptar a su jardinero

El empresario actualmente posee el 5,7% de las acciones de Hermès, lo suficiente para ser considerado como uno de los hombres más ricos de Suiza.

La idea de traspasarle su herencia a su jardinero data de octubre de 2022. Según consigna El País, esa vez le envió una carta a su abogado para pedirle que tramitase la adopción del trabajador para dejarle su millonaria fortuna.

Por lo que se sabe hasta ahora, el afortunado está identificado como "Jadil", es de nacionalidad marroquí, está casado con una española y tiene dos hijos, de acuerdo a información de El Mundo.

De concretarse los deseos de Puech, el jardinero no solo heredaría un millonario dineral, sino también propiedades ubicadas precisamente en Suiza y Marruecos, las que están avaluadas en 5,9 millones de dólares (5,2 mil millones de pesos chilenos). 

 

Nicolas Puech es considerado uno de los hombres más ricos de Suiza (El País)

 

Los asuntos que Puech debe resolver

Para adoptar a su jardinero, lo primero que Puech debe resolver es un pacto sucesorio que firmó en 2011 con Fundación Isócrates, orientada a la protección y promoción del debate público mediante proyectos de lucha contra la desinformación.

Dicho acuerdo establece que, una vez que el heredero de la marca Hermès falleciera, el organismo recibiría su fortuna como una donación.

Sin embargo, a principios de año, el diario suizo Tribune de Genéve señaló que el multimillonario habría cambiado de parecer, precisando que "tiene la intención de hacer otros arreglos testamentarios".

Al conocer la noticia, desde la fundación criticaron el anuncio. Nicolas Borsinger, secretario general de Isócrates, catalogó la decisión del octogenario como una "anulación repentina y unilateral de un pacto, realizado gracias a un acto que debe considerarse nulo", según indicó Agencia AFP.

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