"Es una bendición": Joven inglesa se alimenta por una sonda en su corazón debido a trastorno hereditario

Sarah Cresswell es una joven inglesa de 30 años que se alimenta a través de una sonda en su corazón, debido a una complicación intestinal. Bajo el usuario @nauseatedsarah, la joven cuenta en TikTok los desafíos y los detalles de su condición. 

A través de un catéter intravenoso, llamado Nutrición Parenteral Total (NPT), Sarah se autoadministra soluciones con todos los nutrientes necesarios para su supervivencia. 

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Este peligroso método, que tiene un alto riesgo de terminar en una sepsis, ha resultado ser su última opción de alimentación, luego de que su cuerpo rechazará cualquier alimento y sondas nasales de nutrición.

¿Cuál es su diagnóstico?

Gastroparesia es el nombre de la enfermedad que afecta el movimiento normal del sistema digestivo que padece Sarah y que en algunos casos puede aparecer en las personas con diabetes.

"En pocas palabras, mi sistema digestivo está paralizado, así que no puedo ingerir alimentos", detalló la joven en uno de los videos.

Pero en el caso de Sarah, la falla intestinal es el resultado del Síndrome de Ehlers-Danlos. Este es un trastorno hereditario que afecta a los tejidos conectivos del cuerpo, siendo los más dañados los vasos sanguíneos, la piel y las articulaciones.

Por esta misma condición, Sarah tiene serios problemas para trasladarse y solo lo puede hacer con una silla de ruedas empujada por terceros, ya que si ella la mueve, suele terminar con el hombro dislocado.

"¿Sientes hambre?"

Para los usuarios ha sido llamativo escuchar la historia de Sarah, quien abiertamente responde preguntas en la plataforma, las cuales suelen ser sobre su apetito.

 

Captura de pantalla YouTube

 

"La pregunta más frecuente que recibo cuando le digo a las personas que estoy en NPT es: '¿Todavía sientes hambre?'. Y la respuesta es no, porque recibo todas mis calorías y mis niveles de azúcar se mantienen estables, pero mi estómago todavía cruje", explicó la joven.

Además, Sarah tampoco extraña comer. Es que este delicioso hábito de supervivencia para ella representaba más un problema que un agrado.

"La comida y yo no tenemos una buena relación. Durante los 30 años de mi vida, la comida me ha causado dolor significativo, vómitos y en general ha sido horrible. Estar en esta forma de nutrición es una bendición", concluyó la joven.

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