Un escupitajo revela al asesino de dos mujeres violadas y estranguladas 10 años atrás: el hombre admitió los delitos
- Por Meganoticias
Geovanni Borjas, de 38 años, se declaró culpable ante un juez, más de 10 años después de cometer violación y asesinato de las jóvenes hispanas Michelle Lozano, de 17 años, y Bree'Anna Guzmán, de 22.
El sujeto de Torrance, en California, Estados Unidos, no impugnó los cargos de asesinato múltiple y asesinato en la comisión de una violación y un secuestro. Dejó los cuerpos de sus víctimas en autopistas de Los Ángeles, reseñó People.
Los investigadores dieron con el homicida, al analizar el ADN de su saliva luego de tomar muestras de un escupitajo que lanzó sobre la acera. Geovanni fue arrestado hace cinco años y finalmente admitió ser culpable de agredir sexualmente y matar a Michelle y a Bree'Anna, publicó New York Post.
Hallan al culpable al realizar prueba de ADN familiar
La adolescente desapareció el 24 de abril de 2011 y su cuerpo apreció al día siguiente cerca de la Autopista 5 Golden State en el vecindario de Boyle Heights. Michelle fue puesta en un contenedor de plástico que se abrió al caer al suelo. Su cadáver estaba envuelto en bolsas de plástico, recogió ABC7.
Ocho meses después, el 26 de diciembre de 2011, Bree'Anna salió a comprar medicina para la tos y jamás regresó. Sus restos fueron hallados justo un mes después, el 26 de enero, en avanzado estado de descomposición y con poca ropa, cerca de la Autopista 2 Glendale. Al parecer, el cuerpo fue simplemente arrojado allí.
Las muestras de ADN de las mujeres no produjeron coincidencia en las bases de datos criminales de Estados Unidos para hallar al culpable. Los investigadores recurrieron a la prueba de ADN familiar, técnica que les permitió comparar la evidencia con otras bases de datos para identificar posibles familiares del feminicida.
Así dieron con el padre de Geovanni Borjas, cuyo ADN estaba registrado por un delito anterior. En las labores detectivescas, seguían al sospechoso cuando éste escupió sobre la acera. Entonces, recogieron muestras de su saliva y la analizaron.
Los resultados coincidieron con el ADN recolectado en las escenas del crimen. El sujeto fue arrestado en mayo de 2017 y ahora podría ser sentenciado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
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