Muere de Covid policía que desafió vacunación obligatoria y mandó a gobernador a "besar su trasero" por despedirlo
- Por Meganoticias
El pasado mes de octubre Robert LaMay (51), un antiguo oficial de la Patrulla Estatal de Washington, Estados Unidos, hizo noticia en su país al ser despedido de su trabajo por el gobernador demócrata Jay Inslee, debido a que desafió la vacunación obligatoria contra el coronavirus impuesta por este último.
Tras 22 años de carrera, LaMay tuvo que hacer un retiro anticipado, no sin antes mandar al gobernador a "besar su trasero". El pasado día viernes, el antiguo policía murió a causa del Covid-19.
"Inslee puede besar mi trasero"
Al ser despedido por Inslee, LaMay se despidió de sus compañeros con un último mensaje por la radio de su patrulla. La acción se ganó la atención de varios estadounidenses, sobre todo, entre quienes cuestionan los antídotos contra el SARS-CoV-2.
"Esta es mi última entrega de turno después de 22 años servir a los ciudadanos del estado de Washington. Me pidieron irme porque soy 'sucio'", dijo en esa oportunidad.
"Esta es la última vez que me escucharán en un auto de la Patrulla Estatal y Jay Inslee puede besar mi trasero", agregó momentos antes de finalizar su discurso arrojando la radio al estilo "mic drop".
Víctima del coronavirus
Pese al revuelo que causó su acción, pasaron solo tres meses para que Robert LaMay perdiera la vida víctima de la enfermedad frente a la que decidió no vacunarse.
Tras conocerse su fallecimiento, el jefe de la Patrulla Estatal de Washington, John R. Batiste, envió sus condolencias a su familia.
"Estoy realmente triste por la noticia de la muerte de nuestro antiguo colega Robert LaMay. Las oraciones y recuerdos de esta agencia están con su familia y seres queridos", dijo Batiste en un comunicado.
"Rob sirvió honorablemente por dos décadas, y nos decepcionó verlo partir de la agencia el pasado octubre. Su servicio al estado y a la agencia serán largamente recordador y apreciados", agregó.
De acuerdo a Yahoo! News, la muerte de LaMay es una triste tendencia entre los agentes del orden en Estados Unidos. Solo en 2021, más de 300 agentes federales, estatales, tribales y locales murieron a causa del coronavirus, convirtiéndose en el año más mortífero para la policía en casi un siglo.
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