Ladrón lo asesina mientras socorría a indigentes y ahora sus órganos ayudarán a 106 personas
- Por Meganoticias
El altruismo del joven mexicano, Pablo Hidalgo, fue algo que llevó más allá de su trágica e inesperada muerte, cuando dispuso donar todos los órganos de su cuerpo para ayudar a mantener con vida a otras personas.
Pablo era un estudiante de Aviación en Cuernavaca, de 24 años. Su solidaridad y aprecio hacia los más necesitados, lo hacía recolectar comida para aquellas personas que no tenían empleo o vivían en situación de calle.
El 4 de julio de 2021, cuando se disponía a entregar cobertores a personas de escasos recursos cerca de una tienda de Tamaulipas, fue interceptado por un delincuente, quien lo asesinó de un balazo en un intento por despojarlo de las llaves del automóvil, reseñó el Diario de Morelos.
Familiares apoyaron donación de órganos
El cuerpo de Pablo Hidalgo fue trasladado hasta el Hospital General Regional de Medicina Familiar. Conmovidos por el legado que dejó el joven, el personal médico y trabajadores le hicieron un paredón de honor mientras ingresaba al quirófano para extraer todos sus órganos.
El procedimiento se llevó a cabo con los más estrictos lineamientos de bioseguridad, para no contagiar de Covid-19 a los receptores y personal de salud, de acuerdo a la información proporcionada por los autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social de Morelos a través de las redes sociales.
“Afortunadamente contamos con el apoyo de los familiares, ya que en vida el paciente expresó el deseo de donar sus órganos; en cuanto supimos se activó todo el plan para realizar la procuración multiorgánica y que la donación fuera posible”, declaró a Aristegui Noticias, Delia Gamboa, directora del centro de salud.
Donación ayudará a más de 100 personas
Gamboa explicó que a pesar de la tragedia familiar que viven los parientes de Pablo Hidalgo, la valentía del joven ayudará a tener una mejor calidad de vida a 106 personas.
Precisó que el corazón e hígado se enviaron al Centro Médico Nacional La Raza. Los riñones y córneas se trasladaron al Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI. Mientras que el tejido muscular esquelético y la piel se llevaron al Banco de Tejidos del Estado de México, para beneficiar a un centenar de personas.