"Viudo negro" es condenado por robar a hombres que conocía en aplicaciones de citas
- Por Meganoticias
¿Qué pasó?
Un hombre argentino fue condenado a ocho años de cárcel en Buenos Aires, Argentina, luego de que se le acusara de haber cometido 34 robos a personas durante citas casuales organizadas por Facebook, Tinder, Hornet, Grindr y Scruff.
Tal como indica Infobae, el modus operandi de Matías Ezequiel Quiroga consistía en lo siguiente: se creaba una cuenta falsa en una app de citas, jugando con el orden de sus nombres y apellidos y haciéndose pasar por un estudiante de Derecho, y empezaba a seducir a los usuarios, especialmente turistas.
Después de haber hecho “match” con sus futuros objetivos, coordinaba citas con personas que luego lo llevaban a sus hogares. Una vez dentro, se las ingeniaba para meter somníferos en el trago de la persona y, así, aprovechaba de robar dinero, joyas, celulares, computadoras, objetos de valor, e incluso televisores.
En dos ocasiones, la droga no logró dormir plenamente a las víctimas, por lo que Ortega tuvo que recurrir a una medida drástica: amenazarlos con un cuchillo mientras decía que esperaba "a los de abajo", haciendo alusión a compañeros ficticios que, supuestamente, esperaban abajo del edificio.
Tatuajes en el cuello y en el antebrazo
Si bien Ortega fue detenido en 2019, fue condenado esta semana, por los 32 robos simples y 2 casos de robo con armas, realizados entre febrero de 2015 y mayo de 2019 en Buenos Aires.
“Son absolutamente notorias las coincidencias y los detalles que dieron los damnificados en sus relatos: cada uno explicó las circunstancias en que conocieron al imputado y cómo se dieron los hechos” indicó la auxiliar fiscal Bárbara Seghezzo, al referirse a los dichos de dos querellantes que declararon en la primera audiencia.
El hombre fue reconocido por su aspecto físico: un tatuaje en el cuello y otro en el antebrazo contribuyeron a la identificación del “viudo negro”.
Desde la primera jornada del juicio oral, Quiroga reconoció haber cometido los delitos, pero aún así fue condenado a ocho años de prisión, agravado por la multiplicidad del hecho, la cantidad de objetos robados, y algo no menor: la utilización de drogas en los delitos.
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