La gran preocupación del hombre que encontró y cuidó a un cóndor cuya historia se viralizó en redes sociales
- Por María Ignacia Pentz
Edgardo Dellagaspera, un estanciero de Loncopué, una localidad de la provincia de Neuquén, en Argentina, hace unos meses encontró un pichón de cóndor en el patio de su hacienda, a pocos kilómetros de una condorera, y lo bautizó como Condorito. Desde entonces, lo ha cuidado y criado, siempre acompañado de personal especializado, y hoy, ya puede volar y está acostumbrado a su entorno natural.
"Un día de marzo apareció acá solo y con una patita lastimada. Lo estuvimos curando de una lesión que no parecía ser grave y desde ese día se me acerca cada vez que lo llamo. Cuando me contacté con la gente de Fauna me dijeron que era un pichón macho que creen que nació en octubre del año pasado y que aparentemente había perdido contacto con sus padres", señaló Dellagaspera al diario La Mañana de Neuquén.
Sin embargo, actualmente atraviesa por un mal momento: personal del Ecoparque de Buenos Aires se lo quiere llevar. A partir de la difusión del video que, en un principio, sólo compartió con su familia por Whatsapp y ellos reenviaron hasta que se viralizó en redes sociales, funcionarios del Ecoparque se enteró del caso y quiere hacerse cargo del ave.
Pero Edgardo se niega. "Dicen que vienen a buscarlo para llevarlo a un lugar adecuado, pero aquí el cóndor está al aire libre, en su habitat natural y que reconoce como propio, así que no estamos de acuerdo con esa intervención", enfatizó al medio local.
EL CÓNDOR NO BAJÓ DEL CIELO
El video que sigue Edgardo Dellagaspera con Condorito generó gran interés en redes sociales y fue ampliamente difundido. Y aunque la historia que se planteó parece muy linda, el estanciero se encarga de aclararla.
"La gente exagera todas las historias. El cóndor no bajó del cielo para saludarme simplemente porque era pichón y todavía no había aprendido a volar. Y tampoco lo habíamos curado de una herida grave, sino que tenía una pequeña lastimadura", explicó.