Flamengo lo da vuelta en tres minutos ante River Plate y se consagra campeón de Copa Libertadores

  • Por Mega Deportes

En un final de infarto, Flamengo hizo historia al vencer por 2-1 a River Plate y se tituló campeón de la Copa Libertadores 2019.

El elenco brasileño contó con la inspiración de Gabriel Barbosa para alcanzar su segundo torneo continental, en un desafío que se vivió en el Estadio Monumental de Lima, Perú.

River dio el primer golpe

El cuadro de River Plate mostró mayor actitud e ímpetu para afrontar el compromiso ante un rival que se vio desdibujado en la cancha.

Así tempranamente llegó el primer gol del compromiso y fue obra del colombiano Rafael Borre (14’).

Un centro rasante a la altura del punto penal, no pudo ser rechazado por la zaga del “Mengao” y apareció el joven cafetalero, de 24 años, quien se logró despegar de su marcador y sacar un disparo bajo y ajustado para batir al golero Diego Alves.

Con el gol, el equipo del “Muñeco” manejó el partido con un arduo trabajo en medioterreno y solidez defensiva para “cortar” los circuitos del conjunto rojinegro hasta el final del primer lapso.

Flamengo lo dio vuelta con inspirado Gabigol

Ya en el segundo lapso, el DT argentino dio mayor solidez a su equipo y optó por cerrar el partido.

Al frente, Flamengo no encontraba los espacios, lo que hacía presagiar un nuevo título millonario.

Incluso, el “Muñeco” permitió el ingreso del zaguero chileno Paulo Díaz, quien se acomodó en la zona de defensores para cuidar el resultado.

En contrapartida, el cuadro del “Mengao” se jugó sus cartas y apareció “Gabigol”  para dar vuelta la historia en un final de infarto.

El atacante primero marcó el 1-1 al conectar un centro rasante a los 89 minutos ante la desazón de su rival.

Y cuando River Plate no se sacudía del empate, otra vez se filtró en el área y batió al meta Armani con un tiro cruzado para establecer el 2-1 a los 92 minutos.

Gabigol seguiría siendo protagonista, ya que junto a Exequiel Palacios terminó siendo expulsado.

Así Flamengo se quedó la corona y logró la segunda Copa Libertadores tras la alcanzada en 1981.