Paolo Guerrero: "Creo en la justicia de Suiza"

  • Por Camila Antonucci

Paolo Guerrero continúa en la incertidumbre respecto a su participación en Rusia 2018. Y es que el delantero peruano volvió a sincerarse y se mostró optimista. "Creo en la justicia suiza y por eso estoy aquí, entrenando, porque puede ser que en pocos días salga la decisión. Y si Dios quiere, después me puedo integrar a la selección para participar en el Mundial", aseguró en una entrevista para la BBC. 

El TAS aumentó su sanción de seis a catorce meses, situación que le impide jugar el Mundial. A pesar de que se el jugador se excusó de haber tomado alguna sustancia prohibida de forma voluntaria, se entendió que el metabolito de cocaína encontrado en sus análisis fue suficiente prueba. "Yo no me explico por qué he sido castigado. Casi nadie en Perú lo entiende. Yo no he hecho trampa. Todo el mundo sabe que en ningún momento quise hacer trampa".

Pero Paolo Guerrero sigue peleando por demostrar su inocencia: "El dopaje es castigado cuando los jugadores o los atletas hacen trampa. Ya fue reconocido ante la FIFA, WADA y el TAS que yo no hice trampa. Es una norma que se me está aplicando. Estoy tratando de que el tribunal de justicia se dé cuenta de que en mi país el mate de coca es algo cultural".

Su calvario comenzó en Lima, precisamente en el hotel Swissotel por un té que le dieron en el restaurante. "En realidad no sabemos, se supone que fue un mate de coca. No sabemos. Lo que ingerí antes de salir para Argentina fue un té de anís. Me lo tomé después del almuerzo porque tenía problemas en el estómago, sufro de gastritis y después del almuerzo le pedí un digestivo al doctor"

"La nutricionista me sugirió que tomara un té de anís para que me fuera mejor porque tenía el estómago hinchado. Me trajeron una taza de té con el sobre para abrirlo yo y comprobé que era un té de anís y yo mismo lo disolví en el agua y me lo tomé", declaró al medio inglés.

Agradeciendo todo el apoyo de los hinchas peruanos, una de sus defensas fue aludir a su intachable carrera profesional. "No tenía en mente que yo, pidiendo un té de anís, el mozo me podía traer otra cosa. No contaba con eso. Tengo 15 años con la selección peruana y nunca ha pasado nada, ni de mi parte ni de otro jugador. Nunca hemos tenido un problema similar".