Las claves de la UF: ¿Por qué no es aconsejable eliminarla y cómo puedo beneficiarme con ella?

Para muchas y muchos, la Unidad de Fomento (UF) es como ese jarabe amargo que ingerían en la infancia: pese a ser desabrido, era útil para cuidar la salud. La UF no evita que la persona se resfríe o enferme, pero sí fortalece las defensas de sus ahorros e inversiones.

Creada en 1967, bajo la administración presidencial de Eduardo Frei Montalva, se implementó en medio de una severa incertidumbre inflacionaria de la época, con el objetivo de ser un incentivo para que bancos y personas pudieran invertir en activos de mediano y largo plazo.

La UF no es una villana en la economía, porque tiene un rol activo ante la inflación y el poder adquisitivo de las personas. A su alrededor existen varios mitos, los que serán despejados para conocer cómo beneficiarse con ella.

¿Qué es la UF y por qué no es aconsejable eliminarla?

La UF no es dinero, sino un índice financiero calculado por el Banco Central que expresa un precio. Más en específico, expresa la reajustabilidad del peso ($), según la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El Banco Central señala a través de un documento que “el valor de la UF se reajusta a partir del día diez de cada mes y hasta el día nueve del mes siguiente, en forma diaria, de acuerdo a la variación experimentada por el IPC que determina el INE”.

 

La UF es un índice de reajustabilidad que es calculado por el Banco Central. Créditos imagen: ATON.

 

Es muy importante saber que la UF no es la causante de la inflación, sino que está indexada para ajustarse de acuerdo a cómo va cambiando la inflación en Chile.

Su principal función es preservar el poder adquisitivo de las personas, cuidándolo de los fenómenos inflacionarios: “El dinero se desvaloriza con la inflación, pierde poder adquisitivo a medida que el nivel general de precios aumenta”, explica el economista Mauricio Holz, a través de una entrevista con Meganoticias.cl.

¿A qué se refiere con la desvalorización del dinero? Un ejemplo: en un mes, con $10.000, una persona puede comprar hasta siete productos en el supermercado. Al mes siguiente, tras una alza inflacionaria, con esos mismos $10.000 solo alcanza para cinco o menos.

 

Cuando los precios de los alimentos que componen la canasta básica suben de precio, significa que la inflación aumentó. Créditos: Shutterstock.

 

Por estas razones, una eventual eliminación de la UF en la economía chilena no resulta muy rentable. Héctor Osorio, economista de la consultora de auditores PKF Chile, asegura que “no es económicamente útil suprimirla, porque nos permite nominalizar los precios según el poder adquisitivo. Eliminarla nos llevará a que (los precios de) algunas cosas se disparen y otros no se corrijan a la velocidad adecuada, en términos del precio que efectivamente debieran tener”.

Holz tiene una postura similar: “Que la UF siga existiendo —pese a ser creada a fines de la década de los '60— sería un reflejo de que su uso está muy extendido y asentado en los mercados, en virtud de su credibilidad y transparencia".

Imaginemos un Chile sin UF

Si no existiera la UF y con la incertidumbre inflacionaria actual —de si seguirá bajando o no en los próximos meses—, el economista y académico universitario, Iván Valenzuela Klagges, dice que "lo más seguro es que los bancos no entregarían créditos hipotecarios. Si es que lo hicieran, no lo harían con la tasa actual, sino con una cinco veces mayor".

Teóricamente, los bancos fijarían las tasas según las cifras inflacionarias del año anterior. Por ejemplo, en 2022 la inflación anual fue del 12,8%: sin la UF, la tasa de interés no podría ser menor a ese parámetro, ya que no les convendría a las entidades bancarias. Por lo tanto, aplicarían una más alta, la que terminaría provocando un fuerte desmedro en el solicitante del crédito.

 

Sin la UF, los bancos no se arriesgarían a otorgar créditos con tasas bajas. Créditos: Freepik.

 

Otro caso: “Si hago un depósito a plazo, en pesos chilenos y a 150 días, el banco me daría una tasa del 5%. Si depositara el mismo monto en UF y en el mismo plazo, me entregaría una tasa del 1%. ¿Por qué la disminución? Porque en el 5% que me daría el banco en pesos chilenos se están considerando las variaciones de la inflación; entonces, puede que gane o pierda con ese dinero. Si la inflación supera el 5%, pierdo dinero; pero si está por debajo, gano”, agrega el experto.

En cambio, “si hago el depósito en UF, tengo la certeza absoluta de que voy a ganar 1% real; es decir, un 1% que sí o sí es utilidad para mí. Si la UF comienza a subir, el depósito a plazo también, y adicionalmente el banco me entrega un 1% de interés”.

Valenzuela Klagges hace la siguiente analogía para sumarse a la visión de sus contrapartes: “Eliminar la UF en este momento sería como suspenderle el tratamiento a un paciente que está en la Unidad de Tratamientos Intensivos (UTI); sería provocar una crisis financiera tremenda. Mientras no se encuentre otro método y no exista estabilidad en la inflación, no es momento para sacar la UF ni para experimentar en otras cosas”.

¿Cómo puedo beneficiarme con la UF?

Osorio cree que uno de los grandes mitos que existe alrededor de la UF es la creencia de que su valor sube de manera imparable —tal como lo hizo en los últimos 27 meses, entre enero de 2021 y marzo de 2023.

Aunque reconoció que ese mito puede ser una verdad, enfatizó que “tenemos acceso a activos o inversiones que se nominalizan en UF”. Ejemplo de ello es lo que ocurre con los fondos de AFP y las pensiones, ambos indexados en UF, “con la garantía de que permanecerán en el tiempo con su capacidad adquisitiva, lo que es muy importante para que el dinero de los pensionados no se vaya depreciando".

El pago del arriendo en UF también es otra forma de beneficiarse, pero tiene doble filo: para que el arrendador (propietario de la vivienda) obtenga ganancias, el IPC tiene que ser positivo (más de 0%), de modo que la UF suba. No obstante, eso implica un mayor desembolso del arrendatario y una eventual crisis en los arriendos, debido al alza en el costo de vida.

 

Con la UF, el valor de los ahorros no se va depreciando con el paso del tiempo. Créditos: Shutterstock.

 

Por otro lado, la banca ofrece las cuentas de ahorro en UF. Una de las más populares es la que brinda BancoEstado, la que está disponible para sus clientes —aquellos que poseen CuentaRUT, por ejemplo— y no clientes, quienes pueden solicitarla gratis en alguna de las sucursales de la entidad estatal.

Eso sí, hay un aspecto fundamental que se debe considerar acerca de este tipo de cuentas de ahorro. Al menos hasta el próximo 9 de abril, la Unidad de Fomento bajará paulatinamente su valor, y podría seguir haciéndolo si es que las medidas adoptadas por el Gobierno y el Banco Central logran disminuir la inflación.

Si se cumple esa meta, una persona que tiene una inversión en UF podría perder parte del capital que invirtió y solo se verá favorecido por el interés de la tasa.

 

Las cuentas de ahorro en UF pueden tener ventajas o desventajas, dependiendo de la situación económica. Créditos: Shutterstock.

 

¿Y qué pasa con los sueldos? ¿Es viable que se paguen en UF? Usualmente, esta discusión es otra de las más comunes que se dan en torno a la Unidad de Fomento. Si bien cree que trabajadores y trabajadoras pueden beneficiarse en el corto plazo —no a la larga—, Valenzuela Klagges sostiene que si la inflación sigue subiendo, esta modalidad salarial podría ser dañina para los costos fijos de las empresas y la economía del país.

En estos costos fijos están contemplados los sueldos: “Si se paga en UF, las empresas cada mes tendrían que aumentar sus costos fijos, lo que les significará menores ganancias. Si tenemos un proceso inflacionario, se desencadenarían los siguientes hechos: la UF aumentará su valor, las empresas pagarán un costo adicional y su liquidez se verá afectada, comenzarán las deudas y las eventuales quiebras, habrá despidos y aumentará el desempleo”, añade.

Conceptos clave en este artículo

Si el objetivo es fomentar la educación financiera, para ello debemos democratizar los términos claves de la economía.

Activos

Es cualquier bien o servicio que le genera una ganancia a la persona. Los activos más comunes son los bienes inmuebles, pues generan ingresos extras mediante el arriendo de casas, departamentos o bodegas. Los vehículos también lo son, siempre que se utilicen para una actividad económica, como el transporte de pasajeros (taxi o conductor de aplicación móvil).

Se diferencia de los gastos, porque estos no provocan ingresos, sino egresos de dinero —y un eventual endeudamiento—; y de los pasivos, que consisten en la deuda con un tercero para adquirir un activo o gasto.

Índice de Precios al Consumidor (IPC)

Medido por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el IPC es la representación del valor del costo de la vida, ya que mide la variación en los precios de los bienes y servicios al que acceden las familias. Si los precios subieron durante el mes anterior, significa que la inflación aumentó, así que la UF hará lo propio para reajustar los instrumentos indexados a ella.

La plataforma CMF Educa, orientada a la educación financiera promovida por la Comisión para el Mercado Financiero, indica que la variación del IPC “puede ser positiva, neutra o negativa, dependiendo de lo que se haya registrado a nivel de los precios. Con la suma de los valores mensuales del IPC se determina el valor anual de la inflación, un dato que consideran todas las empresas para planificar sus actividades, pagar los sueldos y múltiples otras operaciones”.

Inflación

Consiste en el aumento generalizado de los precios, afectando el poder adquisitivo de las personas, que comúnmente es provocado por un desequilibrio entre la oferta y la demanda.

En Chile, el reciente periodo inflacionario ocurrió por el excesivo aumento del gasto en 2021, tras las ayudas estatales y los tres retiros de fondos de las AFP que se implementaron para paliar la crisis socioeconómica del coronavirus, lo que hizo que la economía se "sobrecalentara": por la alta disponibilidad de recursos en la población, la demanda fue inmensamente mayor que la oferta.

Cada año, el Banco Central tiene la meta de que la inflación anual no supere el 3%. Cuando está bien controlada, la inflación permite el desarrollo económico y mejora el bienestar de la economía.

Poder adquisitivo

En simple, es la capacidad de una persona para comprar bienes o servicios mediante una cantidad determinada de dinero, siempre sujeta a la inflación.

CMF Educa añade que “si un conjunto de productos o servicios aumenta de precio —es decir, subió la inflación—, la misma cantidad de dinero no alcanzará para comprarlos”. Por eso se dice que la inflación disminuye el poder adquisitivo.

Todo sobre Economía