Mamografía para descartar cáncer: Estos son consejos prácticos para prepararse para el examen

  • Por Meganoticias

El cáncer de mama es una afección cada vez más común que puede resultar mortal al no ser atendida oportunamente. La mejor forma de detectarlo en su etapa temprana es con una mamografía, que es un examen que busca identificar las lesiones más pequeñas.

La Oficina para la Salud de la Mujer lo describe como un examen de los senos que aplica bajas dosis de rayos X y que localiza cambios anormales que no se sienten con un autoexamen. Se recomienda que las mujeres entre 50 y 74 años se lo practiquen cada dos años.

Es prudente considerar que hay afecciones cancerígenas que no pueden ser detectadas por este estudio, pero existen pruebas clínicas que lo complementan. Entre sus variantes están las de exploración y las de diagnóstico.

Consejos para someterse a una mamografía

Un artículo del sitio especializado Cancer.Net sugiere que para realizarse una mamografía hay que prescindir de desodorante, polvo, loción, perfume o antitranspirante. Debido a que estos productos dejan residuos que se reflejan en el examen e impiden la detección del cáncer de mama.

En el procedimiento no se deben llevar prendas o accesorios, la paciente debe ir preparada para desvestirse de la cintura para arriba y tendrá que usar una bata de hospital que se abre por el frente. Hay que informar al técnico sobre la existencia de implantes, cirugías previas o inquietudes en zonas específicas.

Es prudente programar la prueba dentro de las dos semanas posteriores a la menstruación, evitar la cafeína e ingerir un analgésico de venta libre el día de la práctica. La inspección dura de 10 a 15 minutos, y después de este tiempo se puede regresar a las actividades habituales sin problema.

¿Una radiografía para el cáncer de mama?

El procedimiento, capaz de detectar el cáncer de mama, se realiza con una máquina especial que dispone la mama sobre una placa de plástico que se cubre con otra y ejerce presión, según confirman los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Las láminas toman la radiografía frontal y lateral de ambos senos.

Para la mayoría de las mujeres, este es un proceso molesto, pero el dolor desaparece rápido. El resultado suele estar listo unas semanas después de hacer la mamografía, pero de haber algún problema, el centro médico suele comunicarlo antes de lo previsto.

Cabe destacar que los mamografistas son los capacitados para tomar imágenes radiográficas de los senos, que posteriormente son revisados por un médico especializado.

Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.

Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.

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